Los amantes del flamenco deben visitar Utrera al menos una vez en la vida. Situada en Sevilla, esta ciudad se considera como la cuna del flamenco y está muy ligada al mundo taurino. El turismo en Utrera gira en torno a lo anterior, pero su casco histórico es un gran elemento a tener en cuenta (declarado Conjunto Histórico - Artístico). Con una historia que aglomera fenicios, romanos y árabes, Utrera completa su oferta turística con la Reserva Natural del Complejo Endorreico, famosa por las numerosas lagunas que albergan una rica avifauna.
Una de las mejores maneras de conocer Utrera es pateando su casco histórico. En los Barrios de Santiago y Santa María, rodeados por restos de la muralla medieval y antiguos arcos, descubrimos el Castillo de Utrera, de origen árabe. Tras sufrir daños y ser reconstruido varias veces, hoy en día es posible pasear por sus aledaños y disfrutar de unas impresionantes vistas. Muy cerca, nos llamará la atención la imponente Iglesia de Santiago el Mayor, de estilo gótico y con unas bóvedas muy elaboradas.
Viajar a Utrera te permite conocer la historia de la arquitectura religiosa de España. Callejeando por la ciudad tropezaremos con varios ejemplares, como la Iglesia de Santa María de la Mesa, conocida por su prominente torreón ricamente decorado con un estilo gótico y renacentista. El Convento de la Purísima Concepción, famoso por sus adornos mudéjares de madera junto con el Santuario de Nuestra Señora de Consolación, con su sensacional altar barroco, son otros de los ejemplares religiosos que hacen que los viajes a Utrera merezcan la pena.
Aunque las muestras históricas y culturales son grandes focos de viajeros, el turismo en Utrera se alimenta en gran medida del flamenco. Cuna del famoso Potaje Gitano, el festival de flamenco más antiguo del mundo, resulta agradable pasear por el centro histórico con sus pequeñas tabernas y peñas con espectáculos en vivo donde, sin duda, el viajero se empapará de pura tradición española. Por tanto, visitar Utrera es vivir el mundo del flamenco en primera persona con pasión y emoción.