En la Comarca de Ribiero, en Ourense, se encuentra la antigua localidad de Ribadavia, vinculada desde sus orígenes al vino que da nombre a la región. Viajar a Ribadavia es conocer una ciudad ligada a las vides, pero también todo un sinfín de historias y leyendas que guarda en su memoria y en su patrimonio. Una de las mejores maneras de conocer Ribadavia es explorando su centro medieval. Destaca el barrio judío de los siglos XII y XIII, que gira en torno a la pPaza de la Magdalena y de la que fluyen varias calles estrechas y laberínticas.
Cerca del casco histórico se encuentra el Castillo de los Sarmiento, que data del siglo IX y que aún retiene su muralla con 3 de las 5 puertas originales. En su interior alberga tumbas talladas en la propia roca de más de mil años de antigüedad.
En el centro del casco antiguo abundan las iglesias de estilo románico, como la Iglesia de Santiago Apóstol, del siglo XII, famosa por su techo de madera original. La más antigua de la ciudad es la Iglesia de San Juan, también de estilo románico y que durante un periodo de su historia funcionó como hospital para atender los cuidados de los peregrinos que se dirigían a Santiago.
Para rememorar este pasado medieval de la localidad se celebra cada año la Fiesta de la Historia, un buen momento para visitar Ribadavia. En estos días la ciudad entera, tanto vecinos como visitantes, salen a las calles engalanados de trajes de época para celebrar torneos, bailes y banquetes.
Los viajeros que disfrutan de los espacios naturales y el contacto con la naturaleza, también encontrarán en el municipio un buen lugar en el que pasar sus vacaciones. El turismo en Ribadavia tiene mucha influencia del medio rural. Los entornos que se pueden visitar son espectaculares y cuentan además con varias casas y hoteles rurales. Además, los viajes a Ribadavia no dejan de lado nuevas experiencias para el paladar. Visitar los campos de vides y las bodegas que allí se encuentran es casi de obligado cumplimiento.