Si vas a hacer turismo en Boal encontrarás un concejo donde prima el gusto por la buena cocina y los productos naturales. Su gastronomía es uno de sus baluartes, y motivo suficiente para visitar Boal.
La cocina tradicional boalesa aprovecha todos esos recursos naturales que le brinda la tierra para hacer platos como el caldo de cimois y berzas o rabizas. Además, es un municipio rico en carnes, lo que da lugar a otros platos como la empanada de carne o embutidos, el lacón con cimois y cachelos, o la rapa de maíz.
En lo referente a dulces y repostería que podrás probar si vas a conocer Boal, cabe mencionar las cocadas, la venera y los cereixolos.
Pero además, la ciudad cuenta con un amplio patrimonio siendo ejemplo de ello el Palacio de Miranda en Prelo, de los siglos XV y XVI, y declarado bien de interés cultural en 1982, el Palacio de Berdín del siglo XVIII o el palacio de Armal, entre otros muchos que encontrarás en la información turística de Boal.
También es importante la iglesia de Santiago Apóstol de Boal, construida entre 1831 y 1837, y su lavadero público, construido con capitales americanos e inaugurado en el año 1928.
En cuanto a sus festividades, hay que mencionar la Feria de la Miel, celebrada en el último fin de semana de octubre, o en el 1º de noviembre. Esta feria es uno de los distintivos turísticos del concejo de Boal, cuya miel, generalmente de la flor del brezo, es ampliamente valorada.
Si vas a viajar a Boal en esta fecha, podrás asistir a la exposición y venta de miel, conferencias relacionadas con la temática apícola, concursos y otras actividades como carreras, actividades deportivas, conciertos de música...