Medina del Campo

A orillas del río Zapardiel, Medina del Campo cuenta con un conjunto histórico y monumental envidiable. Su Plaza Mayor es el epicentro de las principales festividades del pueblo, como su famosa feria. Por otra parte, uno de los motivos por los que merece la pena visitar Medina del Campo es porque cuenta con un Museo de Ferias, siendo la única localidad española en tenerlo. La Semana Santa del municipio es de gran atractivo para los viajeros de la región. Además, es la capital de la Denominación de Origen Rueda, con una importante zona dedicada al vino con más de 80 bodegas, motivo por el cual muchos entusiastas aficionados eligen viajar a Medina del Campo.Las raíces romanas y los vestigios de la Edad del Hierro han configurado un peculiar conjunto Histórico y monumental en el municipio. Paseando por la villa, no tardamos en ver que destaca el Castillo de La Mota, con un color rojo característico del lugar. La Torre del Homenaje, que llama la atención desde la lejanía, atraerá a los curiosos que quieren conocer Medina del Campo y su historia. Abierto al público, se puede caminar por el patio de armas, la capilla o el tocador de la reina, declarado Bien de Interés Cultural.La localidad, con su gran número de bellos recovecos y monumentos, fue declarada conjunto Histórico-Artístico. En la Plaza Mayor nos encontramos con la casa donde murió en 1504 la Reina Isabel la Católica, que cuenta con una estatua para recordar este hito histórico. Los viajes a Medina del Campo son de cultura e historia. Recorriendo el casco urbano nos sorprenderán otros tesoros en forma de arquitectura, como el Palacio de las Dueñas, la antigua residencia de Carlos I. Es un edificio renacentista-plateresco con un bello artesonado y un precioso claustro. Haciendo turismo en Medina del Campo se pueden descubrir bellos rincones como la Colegiata de San Antolín, de estilo gótico, cuya fachada destaca por el balcón del Pópulo y su torre donde se alberga La Piedad, una magnífica obra de Juan de Juni.