Reikiavik

La capital de Islandia, Reikiavik, queda bañada por las aguas de la bahía Faxaflói. Es, para muchos, la puerta de entrada al país y punto de partida para explorar los paisajes volcánicos, atestados de geiseres y fantásticas termas calientes de Islandia. Además, su proximidad al círculo polar ártico, permite observar auroras boreales, uno de los fenómenos más espectaculares que ofrece la naturaleza. Repleta de galerías de arte contemporáneo, restaurantes de moda y una amplia oferta nocturna, Reikiavik se ha constituido como una ciudad moderna en contraste con su tradicional espíritu marinero y su milenaria cultura islandesa.

A pesar de que Reikiavik no dispone de gran concentración de edificios históricos como otras ciudades europeas, los monumentos que allí se encuentran son realmente impactantes. Al visitar Reikiavik, podrás entrar en la Hallgrimskirkja, una impresionante iglesia modernista desde cuya torre se obtienen las mejores vistas de la ciudad, o la Harpa, un luminoso centro de conciertos cuyo diseño la ha convertido en la estrella del horizonte.

Además, esta ciudad es el lugar ideal para descubrir y comprender la cultura única de Islandia. Cuando viajes a Reikiavik podrás ir a visitar los yacimientos de Hofsstadir, una muestra de su gran pasado vikingo, o recorrer la Islandia medieval en el Museo Nacional de Islandia.

El turismo en Reikiavik, como la esencia de la ciudad, queda ligado al mar. El Viejo Puerto atrae a los visitantes a disfrutar de las raíces marineras de la ciudad. Desde allí salen los barcos que pretenden avistar ballenas en las frías aguas de la bahía, o simplemente visitar islas cercanas donde poder disfrutar de los frailecillos, la naturaleza espectacular o, más concretamente, las ruinas de la isla de Videy.

La capital de Islandia es también uno de los mejores destinos termales del mundo. Al viajar a Reikiavik podrás disfrutar de la gran cantidad de spas y piscinas termales, así como también de la playa térmica de Nauthólsvík. La famosa ruta del Círculo Dorado que recorre los geiseres y piscinas termales naturales que rodean la ciudad es perfecta para conocer Reikiavik y su maravilloso entorno natural.