El casco histórico de Edimburgo se divide en dos barrios diferentes y los jardines de Princes Street marcan su separación. Hacia el sur comienza Old Town y hacia el norte queda New Town.
La Ciudad Vieja de Edimburgo es la zona más histórica de la ciudad, y en ella encontrarás edificios tan emblemáticos como el Palacio de Holyrood o el Castillo de Edimburgo, ubicado en lo alto de una colina. Y por supuesto algo que resulta imprescindible para recorrer este barrio es pasear por Royal Mile. Es la avenida principal y se divide en cuatro partes: Lawnmarket, Canongate, Castlehill y High Street. Aquí podrás caminar hasta la Catedral Saint Giles, visitar la preciosa calle de Cowgate, contemplar la Universidad de Edimburgo o aprovechar y tomar algo en Grassmarket.
La Ciudad Nueva de Edimburgo, como su propio nombre indica, es la parte más nueva de la ciudad, y en ella destaca la perfección del trazado urbanístico. En tu recorrido por New Town te deleitarás con sus preciosos edificios de arquitectura neoclásica y otros de estilo georgiano, que armonizan perfectamente con el cuidado diseño de las calles.
Este barrio comienza desde Haymarket y se expande hacia el este, hasta Leith Walk. Tres de las calles principales son George Street, donde encontrarás elegantes boutiques y algunos de los pubs más conocidos de la ciudad. Otra de las calles es Princes Street, llena de tiendas y la más cercana a Princes Street Gardens. Y por último Queen Street, donde reina la tranquilidad típica de una zona mucho más residencial.
Otra de las zonas de Edimburgo que no te puedes perder es el barrio de Stockbridge, que se sitúa a tan solo unos minutos del centro. En él descubrirás uno de los barrios más pintorescos y hogareños de Edimburgo, una zona en la que podrás descubrir el modo de vida de los escoceses viendo tanto viviendas típicas como locales de lo más variados y donde podrás adentrarte en la vida nocturna de la ciudad en busca de los auténticos pubs escoceses. También en Circus Lane, podrás contemplar la iglesia de Saint Stephen, y si es domingo no te olvides de visitar el mercado de Stockbridge, uno de los más famosos de la ciudad.
Leith es otro de los barrios que no debería pasar desapercibido en tu visita a Edimburgo. Esta bonita zona de la ciudad bañada por el río Leith mezcla el lujo y el paisaje portuario rodeado de preciosos canales. Aunque antiguamente fue un pequeño pueblo y puerto de la ciudad, éste ya no tiene tanta actividad y se ha convertido en un barrio elegante donde podrás probar un exquisito marisco.
Por último hablaremos del barrio de Canongate, cuya puerta era el acceso al feudo del monasterio de Holyrood. Por esta zona podrás pasear por bellos jardines y detenerte en alguno de los callejones de la Royal Mile, como Tweeddale Court. Además podrás visitar la iglesia de Canongate y pasear por su cementerio, algo que resulta muy común entre la población local.
Edimburgo es una ciudad con mucho encanto repleta de barrios de lo más pintorescos y con un animado ambiente. Seguro que éstos lograrán conquistarte y el encanto de la capital hará de tu visita un recuerdo inolvidable.