cervecería más antigua de Berlin
Escondidos en NikolaikirchePlatz, se encuentran una serie de restaurantes y tiendas curiosas y de souvenirs, así como de productos artesanales. Es una placita muy poco transitada y muy tranquila, al lado de una de las vías principales de la ciudad y de todo el ajetreo urbano, sorprende un rinconcito así tan tranquilo.
La cervecera la descubrí casi por casualidad paseando por entre calles de la plaza y viendo la iglesia por fuera, me fijé en la terraza y gente comiendo, así que decidimos probar y preguntamos si había sitio para 2.
Nos dijeron que sí, y tras ver la carta con sus diferentes opciones entre salchichas, currywrust, ensaladas... nos decidimos por pedir un plato típico de codillo con sus patatas cocidas, sauerkraut y un poco de ensalada, con una buena cerveza berlinesa. Vamos lo ideal para seguir pateando la ciudad después.
Hablando con los camareros, y haciendo amigos, nos explicaron que se trataba de la cervecera más antigua de la ciudad, con al rededor de 500 años. O eso decían. Lo que está claro es que es diferente a la mayoría de cerveceras que se ven por la ciudad y que recuerdan más a atracciones turísticas llenas de visitantes y extranjeros. Menos transitada, quizás algo menos turística, y desde luego, más cercana. El trato con el personal fue de 10 desde luego.
Conclusión: si quieres darte un homenaje culinario antes de despedirte de la ciudad, y te gusta la buena comida casera, local y de calidad, esta pequeña casa que se esconde entre el ajetreo de la ciudad es tu lugar.

