Diana Patricia Montemayor Flores
Protegido y alejado del cuadro urbano
En una gran extensión del litoral de Holbox, donde las playas resultan agrestes; salvajes, durante los meses de primavera las caguamas acuden en solitario, a desovar. Así tuve la gran oportunidad de presenciar este ejemplar cuando salía de su escondite, en la selva cercana a la playa.
Por fortuna este lugar está protegido y alejado del cuadro urbano de la Isla; que ocupa el 25 por ciento del territorio, y solo es posible llegar a él por mar. Es maravilloso que esta especie tenga oportunidad de reproducirse en solitario y que sus crías, sin intervención humana, ingresen al mar.
Pasarán
Veinte años para que las recién nacidas regresen, ya como adultas, a poner sus propios huevos.
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