Un sin fin de tipos de carne entre las...
Un sin fin de tipos de carne entre las que puedes elegir la que más te guste según su aspecto, textura o sabor, todo ello explicado (con las piezas enfrente) por el servicio del restaurante.
La que elegimos nosotros estaba espectacular, nota altísima. En cuando al ambiente y decoración, nada tiene que ver con el típico asador, es más bien una adaptación perfecta al estilo marbellí. En cuanto a precio, puede salir perfectamente por 40€/persona.
A mejorar: la carne la tiene perfectamente tapada pero las lámparas que tienen cerca de la misma estaban repletas de mosquitos, la sensación no es la mejor. Por otro lado, es el típico restaurante que se satura en temporada alta tipo Semana Santa, estaban totalmente sobrepasados.