Lili Winter
Fue un amigo gay el que me llevó a este ...
Fue un amigo gay el que me llevó a este acogedor bar gay. La decoración es rústica, pero bastante amable. La música no era muy de mi gusto pero reconozco que soy difícil cuando se trata de música, así que no soy un buen juez. El precio no era demasiado alta (por lo general 2,50€ por un zumo) y los camareros son simpáticos. Un buen lugar para charlar con los amigos de día o pasar algún tiempo por la noche.