Paseando entre los Venerables
Son sólo 1.200 metros que se recorren en apenas media hora, pero bastan para aprender toda una lección de naturaleza en vivo, de comprender la evolución vegetal y sobre todo de aprender a respetar y amar al gigantesco manto verde que constituye el Yunque.
Como vimos en los anteriores rincones del parque, podemos dejar el coche aparcado en las áreas destinadas al efecto, desde donde siguiendo las perfectamente indicadas rutas podemos recorrer a pie las distintas zonas de el Yunque.
Una de ella es la de los Árboles Grandes hasta la cascada de la Mina, donde incluso podremos darnos un buen chapuzón.