Valle del Ourika

Este Valle situado al sur de Marrakech es la mejor opción que teneis si queréis alquilar un coche y daros una vuelta rápida por los alrededores... Yo alqule un coche y fui hasta zagora y merzouga y me volví (la clasica ruta) Pero en vez de ir de Marrakech a Ouarzazate que es lo que hace todo el mundo baje por todo el Valle de Ourika. Un valle precioso con gargantas, cascadas, valles, montañas... Etc.
En ese valle visite el pueblo de Mulay Brahim que viene bien indicado en el mapa. Allí podeis pararos para tomar algo y visitar su zoco donde veréis que soys los unicos turistas del pueblo. Si sigues por la carretera podrás llegar a Setti Fatma donde podrás encotrar unas cataratas preciosas. Y unos rapidos también increíbles con la sombra del gran atlas. La subida a las cataratas es un poco tortuosa osea que ir con calzado cómodo ya que hay que subir por un medio acantilado.

Es la típica ruta que te preparan cuando visitas Marrakech. En el mismo hotel nos concertaron el guía, la ruta, comida, visitas, etc.

Durante el recorrido hasta llegar a las cáscadas del Ourika pudimos ver diferentes casas de artesanía bereber, recrearnos con las explicaciones de un médico bereber, visitar una casa típica (evidentemente preparada) del valle con la familia haciendo de la cotidianidad algo enmascarado y otra serie de curiosidades más o menos acertadas, pero aparte de esto, el viaje merece la pena.

El único pero fue la trompa de agua que nos cayó mientras ascendiamos a las cascadas y que nos obligó a interrumpir toda la subida. El guia, como sólo nos atrevimos a ir mi compañero y yo, nos regalo una ruta diferente a la que proyectan a los turistas por lo que pudimos disfrutar de la vida real de estos maravillosos pueblos bereberes, de su cultura, de su increíble educación y sabiduría.

En nuestra excursión al Valle de Ourika tuvimos la oportunidad de visitar una casa bereber para conocer todas sus costumbres y su modo de vida. Tal como dice el titulo, una experiencia sin duda muy enriquecedora, ya que tienen una forma de vida totalmente diferente a la que tenemos nosotros, y que te hace recapacitar sobre diferentes aspectos de la vida. Dentro de la casa pudimos ver las instalaciones y los utensilios de su vida cotidiana, y a continuación, nos invitaron a sentarnos en el salón principal, donde la matriarca de la familia nos enseño como se realiza el ritual del té, para a continuación poder degustarlo. El guía que nos acompañaba nos contó algo que me llamó mucho la atención, y fue, que esa familia tuvo que verse obligada a "vender" su intimidad ante los turistas para poder subsistir y así ganar algo de dinero con nuestras visitas, algo que es duramente criticado por el resto de vecinos del pueblo y por lo que son despreciados socialmente entre los vecinos. Además de esto, pudimos ver una chiquita de unos 13 años que nunca había salido de la casa y que no iba a poder hacerlo hasta no contraer matrimonio con algún hombre. Sin duda, unas ideas y una forma de ver la vida totalmente diferente a lo que la mayoría de nosotros conocemos.