Túnel de la Engaña
Lo que en su día fue el proyecto más ambicioso de España, hoy se encuentra en absoluto abandono. El túnel de la Engaña era la obra más difícil del Ferrocarril Santander-Mediterráneo, una obra de dimensiones colosales para la época en que se llevó acabo, un túnel para ferrocarril de doble vía de casi siete kilómetros de longitud que comunicaba Cantabria con Burgos. En su construcción participaron presos que redimían sus penas con el trabajo, aunque finalmente fue la empresa Portolés y Cia quien lo finalizó. Debido a presiones políticas el ferrocarril no llegó a terminarse por 30 kilómetros y el Túnel de la Engaña quedó olvidado hasta el día de hoy sin más uso que el de camioneros que lo usaban para evitar el puerto de El Escudo durante los duros inviernos, hasta que debido al abandono el túnel quedó impracticable. Actualmente ha habido varios derrumbes, uno de ellos impide prácticamente cruzarlo ya.