Tranvías de San Francisco

Si hay algo típico de San Francisco, son sus famosos tranvías.
Los tranvías de San Francisco se han convertido en todo un fenómeno turístico, y se han ganado el título de Patrimonio histórico nacional e incluso de aparecer en algunas estampillas de los Estados Unidos.
En el año 1947 se los quiso suprimir y fue tal la campaña a su favor, que no hubo caso y actualmente transportan unos 12 millones de pasajeros al año.
La ciudad de San Francisco invirtió 65 millnes de dólares en el año 1981 para
restaurarlos en su totalidad.
Actualmente son tres las compañias que los operan : Masón and Taylor, California y Powell-Hyde, siendo esta última la más conocida y usada.

San Francisco es una ciudad llena de colinas, por lo que la mejor manera de moverse son los cable cars, unos tranvías que son arrastrados por un cable que va bajo tierra y al que se enganchan.

El precio del billete sencillo es de 5 dólares, pero con la tarjeta de transporte que se puede comprar diaria, de tres días, de siete o mensual, se puede montar ilimitadamente en todos los transportes, incluidos estos históricos tranvías.

Aunque demasiado tiempo de espera. No recomendable como medio de transporte principal, pero único en el mundo: Todo el mecanismo es manual, y como no tiene un recorrido circular, cuando llega al final del trayecto, la plataforma donde termina, gira, también manualmente, para comenzar de nuevo su recorrido.

Siempre es bonito viajar en tranvía, pero quizás este sea de los más especiales de todos. Además es económico y rápido para moverse por la ciudad.

Es genial ver como los conducen y subir y bajar cuestas en San Francisco de la forma mas autentica. Súper divertido.

Montados en sus icónicos tranvías.

Mi consejo es usar el otro que es menos pintoresco pero solo vale 2$ no 6$ como este.

No es nada de otro mundo, pero hay que hacerlo.

Se pueden comprar los tickets muy cerca, lo recomiendo.