El atardecer más espectacular de Yokohama.
La Terminal de Ferris de Yokohama es la más grande de Japón y una de las más transitadas de Asia. Es considerada una de las maravillas de la arquitectura moderna, siendo acreedora a premios como el “Enric Miralles” en 2004. Su diseño –lleno de curvas y ángulos agudos- intenta fundirse en el paisaje de Yokohama de la manera más sutil posible. La parte superior es un gran arco sobre el cual hay un parque público totalmente accesible. Desde ahí, se pueden tener las mejores vistas de los rascacielos en la ciudad sin siquiera sentir que se está en una terminal de ferris.
El atardecer que pasé en el parque de este sitio lo recuerdo como uno de los más bonitos que vi en Japón. Conforme el cielo se va oscureciendo, los gigantescos rascacielos de la zona de Minato, en Yokohama, se iluminan. La silueta del famosísimo Monte Fuji se observa claramente en un hueco entre edificios creado intencionalmente para que el volcán no se perdiera nunca de vista. La rueda de la fortuna se convierte en un reloj de manecillas y a las 21:00 comienza un espectáculo de luces realmente impresionante.
Uno puede pasarse toda la tarde dando vueltas por el parque (que a su vez es el techo de la terminal de pasajeros) y entre la espectacularidad de la ciudad y el ir y venir de los barcos, olvidarse del tiempo hasta que llega el anochecer.
