Sagrado y volcánico
Parece que a última hora de la tarde es el mejor momento para visitar algunos enclaves sagrados balineses, sobre todo los mas íntimos y menos abarrotados. Por eso aprovechamos lo que quedaba de luz solar para acercarnos a Pura Tirta Empul, muy cerca de Ubud, donde nace el río Pakrisan.
Se paga la entrada, muy barata, apenas 1 euro y se camina por un delicioso jardín muy cuidado, con preciosos árboles y plantas realmente espectaculares.
Llegamos a unos patios con piscinas rectangulares de cuyos caños brotan clases específicas de agua sagrada que los devotos agradecen con elaboradas y abundantes ofrendas rituales.
El agua que viene del cercano río pasa primero por un estanque donde hay una salida de calor volcánica, que es perfectamente visible gracias al fango que borbotea sin cesar cerca de la superficie y el movimiento de las algas y plantas acuáticas que viven en la cristalina agua.
Junto a este estanque se levanta el templo propiamente dicho que data del siglo X, aunque los muros que cierran el recinto, donde no está permitido entrar, son más recientes.
Siempre hay fieles rezando, aunque el tiempo culminante es el periodo de luna llena.
Cuando estemos en este punto miremos hacia la colina.
Con vistas al templo hay edificio sorprendentemente moderno: el Palacio de Gobierno, construido en 1954. Originalmente fue una residencia para los funcionarios holandeses, para ser utilizado más adelante por el ex presidente Soekarno durante sus frecuentes viajes a Bali.
La luz no nos deja seguir disfrutando de este tranquilo enclave, así que volvemos a casa....


