lamaga
De camino a Éfeso, desde Selçuk, un p...
De camino a Éfeso, desde Selçuk, un pequeño cartel indica -de forma demasiado discreta- la entrada gratuita a la fascinante ruina del Templo de Artemisa. Digo "ruina" en singular porque una gigantesca columna y unas cuantas piedras es todo lo que queda del famosísimo Templo de Artemisa. Fue en su día una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo y miles de peregrinos acudían a él a rendir homenaje a la diosa Artemisa (o Cibeles), que era la antigua diosa anatolia de la fertilidad.
En sus tiempos dorados fue mayor que el Partenón de Atenas y se sustentaba sobre 127 enormes columnas todas decoradas con estatuas (una de las cuales es la que pervive).
A pesar de ello, resulta impresionante contemplar las dimensiones de la columna y subirse encima de una antigua maravilla del Mundo. Pero sobre todo, lo que hace este lugar muy especial es la inmensa paz que se respira... La ruina está situado en un prado donde niños y patos juegan al escondite. Al no formar parte de los clásicos circuitos turísticos, es posible estar solo -con los niños y los patos- tranquilamente, apoyado en una de las piedras, contemplando el paisaje, relajándose ante la inmensa paz que se respira. Un lugar que emana historia y leyenda a partes iguales. Un rincón inolvidable y que pasa muy desapercibido.
Leer más



+4