Sitio para no volver
Escogimos este sitio en un viaje de equipo. 17 personas cenamos allí y no puede haber ni un buen comentario, así seguro que no ganará clientela.
El dueño, un señor desagradable que hizo lo posible por parecer antipático, en cada comentario lo arreglaba mas y mas. Con esa poca amabilidad que demostró cuando entramos en la Tapería siguió cada vez que aparecía por la mesa... pero en un acto de gracia final hizo algo que no nos ha pasado en ninguna parte, y mucho menos llevando a 17 personas a cenar.. Y nos soltó con toda su cara dos minutos después de pagar la cuenta: "SEÑORES, se que están muy a gusto viendo el partido (Partido que tenia puesto por internet y se paraba de cada 5 segundos...