Asilah es un pueblo situado en la costa...
Asilah es un pueblo situado en la costa atlántica del norte de Marruecos, a aproximadamente una hora al suroeste de Tánger en coche, y al que merece la pena visitar durante una tarde o una mañana.
Para ir a Asilah, la mejor opción es coger un grand taxi (mercedes color crema) en el centro de Tánger o contratarlo desde tu hotel pactando el precio de antemano.
Esta última opción es muy buena si tu hotel tiene taxistas de confianza que te puedan ofrecer servicios extra por un poco más de dinero como por ejemplo llevarte también a ver el Cabo Spartel y la Gruta de Hércules (que se encuentran de camino), hacer de guía y esperarte en el pueblo de Asilah mientras ves el pueblo, comes o visitas sus numerosos bazares para luego llevarte de vuelta a Tánger.Normalmente un viaje con todas estos servicios suele costar unos 45 euros.
Tánger está situada en el norte de Marruecos, a sólo unos kilómetros de la costa española, y en plena costa del Estrecho de Gibraltar. Esta situación privilegiada ha sido motivo de numerosas disputas a lo largo de los años entre muchos de los pueblos más poderosos del mundo, ansiosos por controlar esta ciudad y su estratégico puerto.
Fenicios, romanos, visigodos, portugueses, ingleses y españoles han ocupado Tánger en algún momento de la historia. Además a principios del siglo XX esta ciudad tuvo el estatus de “ciudad internacional”, que le fue impuesto por un acuerdo entre grandes potencias internacionales.
Precisamente en ese periodo, en los años 30 Tánger fue destino favorito de artistas, filósofos, músicos y escritores famosos. Algunos de ellos llegaron a instalarse allí por años y a crear algunas de sus más famosas obras, como por ejemplo William Burroughs, Paul Bowles o Allen Gisnberg.
Yo visité la ciudad en 2 días. Llegué un sábado a mediodía y me fui el lunes sobre las 15 PM. Volé con easyjet desde Barajas por unos 25 euros.
Creo que con dos días es suficiente para ver todo lo más importante. De hecho nos dio tiempo el domingo a hacer una excursión a un pueblo cercano (a unos 45 kilómetros) llamado Asilah. También visitamos el Cabo Espartel y la Gruta de Hércules, además de la medina de Tánger, parte de la ville nouvelle, el museo de la Kasbah y varios cafés, teterías, restaurantes y hoteles.
En Tánger hay numerosas tiendas con productos pirateados como videojuegos o CD de música. Al anochecer, en algunas de las calles adyacentes al Boulevard Pasteur o la Rue de la Liberté se establecen comerciantes de todo tipo de productos como: gafas de sol, deportivas, pañuelos, cargadores para móvil, libros o incluso radiocasetes.Precios incríbles. Pero ten cuidado con la calidad de los productos.


