El olor a brasas que hay alrededor del restaurante no te dejará indiferente...
Después de pasar por la puerta durante algunos meses, al final ayer me decidí a entrar. Aunque el olor a carne a la brasa me gusta, dentro del restaurante llega a resultar molesto, incluso hay como una neblina en todo el salón que no mola nada. Aún así al rato te acostumbras... Pedimos unas tiras de pollo de entrante y estaban muy buenas, luego de segundos dos hamburguesas; una barbacoa con bacon y una Pampa. La verdad es que la carne está muy rica, aunque tengo que decir que nada que ver con las del madcafe.. No pedimos postre así que ahí no puedo aportar nada, el servicio es agradable y el precio