Chuleria, arrogacia, prepotencia
Hoy he asistido a un espectáculo lamentable. Estaba en la terraza exterior del bar Srilanka Budha Café Chill-Out de Monte Quinto, tomando una copa tranquilamente con mi señora.
Al lado de nuestra mesa, otra mesa con tres parejas de personas de edad, en torno a 60 años diría yo.
Con una chiquilla de unos 15 años y un perrito que ella llevaba de unos 5 kilos. Tipo Yorkshire, ya sabéis.
Levaban allí ya un largo rato, desde antes de que llegáramos, quizás dos copas, disfrutaban de una cachimba.
El perrito ladraba de vez en cuando a algún amigo conocido de ellos que pasaba por allí, según se deducía del ambiente cordial entre el paseante y los dueños del perro.