Todo es pintoresco en Sos del Rey Católico.
Cuando aparece en la lejanía del valle desde la carretera ya es una estampa digna de parar el motor y deleitarse un poco, pero además tiene el encanto medieval de sus calles empedradas y cuidadas. Su estructura encima de una colina, le confiere una dimensionalidad especial. Se puede subir al mirador junto a la torre a contemplar las vistas sobre los tejados y también es muy agradecido alejarse un poquito para tenerlo todo en perspectiva.
Allí nació Fernando el Católico y sus calles siguen perfectamente conservadas, lo que le valió la declaración de Conjunto Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural.