Funciona aún mejor que el Mallu
La Sidrería El Otru Mallu se ubica justo enfrente de la autopista y en concreto en la calle Sanz Crespo. Es bastante nueva ya que se inauguró en el año 2005, y aún así conserva todo el sabor y el encanto de los antiguos chigres de Gijón.
Debido a su enorme fama si se pretende cenar un fin de semana, aconsejo llevar reserva con bastante antelación ya que sino será imposible conseguir una mesa libre y eso que el local no es que sea precisamente pequeño.
Personalmente es una de mis sidrerías preferidas de Gijón ya que tienen prácticamente todos los platos más típicos, aunque de lo que yo he probado aconsejaría pedir: pastel de cabracho, lacón con cachelos, croquetas, chorizos criollos, pollo al ajillo y sus costillas con patatas. Están muy bien las espichas que organizan lo único que para poder contratar una hay que ser un grupo mínimo de 10 personas, excepto los jueves que es cuando prepararan espichas libres.
Lo único bueno es que si no se consigue mesa en este restaurante (cosa que pasa muy amenudo), tienes el otro restaurante de los mismo propietarios que está a menos de 500 metros y es el restaurante El Mallu, con la misma calidad de sus platos, lo único que el restaurante es algo más antiguo porque se creó en el 2001.