Todavía queda selva en Europa
Este día me levanté muy temprano, tenía prisa por llegar a casa de mis amigos, en Alemania. Salí pronto, casi de madrugada, todavía en las cercanías de Mulhouse, la última ciudad francesa antes de llegar a Alemania. Cruzar la "Selva Negra", ya lo había hecho antes, hace ya muchos años. He pasado en ella muchos fines de semanas con amigos; por aquel entonces ni tenía cámara ni nada, aunque si guardo muchísimos recuerdos. Una vez llegué al interior de la misma, la magia de la "selva negra" ( Schwarz-Wald en alemán ) pudo conmigo. Me salí de la "auto-bahn, busqué un pueblito y un rincón para el coche y me arranquè con la bicicleta. Me metí en el primer caminito que se adentraba en el bosque y me predí durante un par de horas...., y esto fúe lo que encontré.