Todavía queda selva en Europa
Este día me levanté muy temprano, tenía prisa por llegar a casa de mis amigos, en Alemania. Salí pronto, casi de madrugada, todavía en las cercanías de Mulhouse, la última ciudad francesa antes de llegar a Alemania. Cruzar la "Selva Negra", ya lo había hecho antes, hace ya muchos años. He pasado en ella muchos fines de semanas con amigos; por aquel entonces ni tenía cámara ni nada, aunque si guardo muchísimos recuerdos. Una vez llegué al interior de la misma, la magia de la "selva negra" ( Schwarz-Wald en alemán ) pudo conmigo. Me salí de la "auto-bahn, busqué un pueblito y un rincón para el coche y me arranquè con la bicicleta. Me metí en el primer caminito que se adentraba en el bosque y me predí durante un par de horas...., y esto fúe lo que encontré.
Bueno, aunque para algunos es un bosque, para otros es una "selva". Se le llama así por el hecho de que cuando el sol baja un poco después de la media tarde, en el interior de la "selva-bosque" todo se oscurece, no se ve un carajo! Los árboles son tan frondosos ( y tan altos) que no dejan pasar casi ningún rayo de luz. Ello propicia un pobre soto-bosque, es decir, que no crece nada en el suelo. La poca vegetación en el suelo provoca, con el paso del hombre, esos caminitos que solo vemos en las "pelis" de "Sissi la Emperatriz", por donde ella pasea de vez en cuando o cruza con el carruaje imperial. Esas escenas en la que ella se asoma por la ventana y la cámara enfoca el exterior......, eso podría ser, solo podría ser, una idea de lo que es La Selva Negra-Die Schwarz-Wald.
Para las dos Martas, Pilar y Padilla, mis minuberas favoritas :)


