Glamour y chic
Es difícil hablar de Saint Tropez sin nombrar el lujo y el estilo que destila cada una de sus esquinas. Desde que ponemos un pie (o una rueda si llegamos en coche) en el primer metro cuadrado de la 'ville', ya nos empapamos de algo diferente: una reunión de Porsche con más de 1.000 vehículos con carpas donde los propietarios que pertenecen a ese selecto club se deleitan con champagne y caviar, o los maravillosos millonarios desocupados que toman el aperitivo en la marina, frente a sus yates, con una tripulación uniformada y lista para pasar revista. Las tiendas de las mejores marcas, las boutiques más exclusivas, se reparten por la zona que inmediatamente da al mar.