la Iglesia y las tumbas
La iglesia de san Pietro in Vincoli fue construida inicialmente en los siglos IV y V para recordar a los apóstoles. Pero fue el futuro Julio II el que la rehabilitó en el siglo XVI. Es, por tanto, una iglesia renacentista, aunque recoge en su interior un sarcófago paleocristiano, un mosaico bizantino...
Pero esta iglesia es famosa por albergar en su interior dos cosas que no os debéis perder: el Moisés de Miguel Ángel y las cadenas de San Pedro. La visita está plenamente justificada por partida doble. Es, además, muy agradable pasear por sus rincones ya que no es una iglesia demasiado transitada -algo difícil en Roma-. Se respira bastante tranquilidad en sus muros. Os recomiendo sentaros un rato a contemplar la bellísima pero aterradora estatua de Moisés y luego bajar a la cripta para contemplar las cadenas de Pedro, mientras que algunos fieles encienden pequeñas velas...