Querido Santo, patrón de Extremadura. ...
Querido Santo, patrón de Extremadura. Aunque pudiste vestir tus pies de oro al ser de buena familia y contar con el interés del rey de España, preferiste andar descalzo y pegado a la tierra.
Ahora tus pies brillan en la estatua que te representa en la plaza de Santa María. Desde allí bendices a la tierra que cambió a tu paso.
Querido Santo, oigo anécdotas sobre ti y te toman por loco. Para cambiar el mundo hay que estar loco. Tú abriste camino a la España de Teresa, de Ignacio y de Javier. Paso por Santa María y beso mis dedos que pongo sobre tus pies. Tú sabes lo que necesito.