No todo en Ibiza son playas y no se...
No todo en Ibiza son playas y no se debería desmerecer el interior. Centrado en ofrecer la experiencia más relajanta, tranquila y encantadora este hotel Boutique que cuenta solo con 12 habitaciones, situado en medio de un pinar, es justo lo que estás buscando si quieres relajarte y desconectar... Llegar es como adentrase en un bosque, donde se encuentra el edificio principal acompañado de una piscina y unas cuantas tumbonas y camas balinesas.
Está muy centrado en filosofía sana, así que además del buffett con productos naturales y cocina al instante (para huevos, bacon, etc...) puedes decantarte por un desayuno totalmente healthy y si quieres disfrutarlo aún más, puedes optar por tomártelo en una de las camas balinesas. También siguiendo esa filosofía, puedes contratar clases de yoga para disfrutar en el jardín sobre el césped.
Las habitaciones son increíbles. La mía estaba en una de las casitas fuera del edificio principal sin estar pegada a ninguna otra. Disponía de un enorme salón con sofás, televisión, nespresso... y luego estaba la parte del dormitorio que contaba con una cama muy grande, de cuento, para pasar a un baño gigantesco. La verdad es que no podía estar más tranquilo y no había ningún ruido que me pudiera molestar. Sin lugar a dudas, una alternativa a los concurridos hoteles de playa que estando cómodo y bien comunicado permite disfrutar de otra Ibiza.
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