Ribadesella - preciosa, pero no iría al prinipio de agosto
La semana anterior al tradicional descenso internacional del río Sella es (si no eres aficionado a la canoa) la peor época del verano para visitar este precioso pueblo: todo está masificado, las calles llenas de gente coches aparcados por doquier, conciertos de música pop en la plaza hasta altas horas de la madrugada y borrachos gritando y rompiendo botellas hasta la mañana.
El pueblo es muy bonito, las casas son de diferentes colores siendo el azul el preferido, con balcones salientes de madera y acristalados.
Si vais a la sidrería Tarteru, no os perdais las croquetas de queso de cabrales y el cachopo, pero sed prudentes al pedir: nosotros pedimos 1/2 ración para los dos y tuvimos que dejar la mitad en el plato. Son raciones gigantescas.