Nahia Viçente
100% Recomendable
Zaragoza tiene su encanto, sobre todo en el casco antigüo. Lo encontramos de casualidad, pero es de esos lugares que te quedan marcados.
Se puede comer de menú o carta. El sitio merece la pena (tiene comedor abajo y arriba. Sitio muy bonito de piedra y vigas. Las sillas de tres tipos), el trato súper agradable y la comida ha estado brutal. Menú que no llega a 12euros. Arroz caldoso pa salivar a gusto. Atún a la brasa pa morirse del gusto y helado de nata con fresas deshidratadas bueno pero que no podía superar a lo anterior..
Volveremos Seguro!
