ANADEL
íntimo
El Hotel Roma está construido en el siglo XIX en este lugar único, ya que está a las puertas de La Granja de San Ildefonso.
El comedor y su comida, que es de lo que puedo opinar, es recomendable.
Agradable recibimiento por parte del anfitrión, y un ambiente romántico e íntimo genial, el espacio clásico me encantó.
En cuanto a las croquetas caseras fantásticas, así como la carne de ternera, el pisto y la magnífica tarta de manzanas, para volver!!!
+5