Carlos Olmo
Tradición con toques de modernidad
Antrialgo es un pequeño pueblo asturiano en la comarca de los Picos de Europa, y este hotel rural y restaurante, que cuando lo visitamos sólo estaba funcionando en la parte de restaurante, esta en una casa casa rehabilitada con bastante gusto, con decoración de elementos taurinos, cajas registradoras, sifones y otros elementos antiguos.
La cocina tiene como base la tradicional asturiana, con toques mediterráneos y criollos, con influencias mejicanas. Tienen en la carta platos clásicos como la fabada ó el pitu de caleya (literalmente pollo de calle), y otros modernos como el pitu con mole o los ceviches.
Nosotros tomamos un menú degustación con crema de boletus, trucha escabechada y salmón ahumado, fabada y cebolla rellena de jabalí, y una selección de postres como arroz con leche y hojaldre crujiente.
Tienen dos pequeños comedores, uno para seis personas y otro hasta catorce, y tanto el servicio como la cocina están cuidados con gran esmero
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