Restaurante La Herrería (Cerrado)

Desde hace tiempo es mi lugar preferido cuando voy a Cercedilla, cosa que hago con bastante asiduidad pues es el pueblo donde pasé mi niñez y adolescencia.
Lamentablemente y por unas circunstancias u otras nunca habíamos entrado hasta este verano para saludar a sus propietario Lourdes y Roberto a los que conozco desde hace más de cuarenta años.
La experiencia en cuanto a lo culinario se refiere fué extraordinariamente positiva. El comedor interior con una decoración sencilla pero perfecta da una sensación de romanticismo que te gace creer que no estas en un pueblo de la sierra. La pequeña pero cuidada terraza plagada de flores de Lavanda, es el lugar para pasar una excelente velada en las noches de verano ya que el lugar, antigua herrería, se encuentra enclavado en uno de los sitios más frescos del pueblo (La Pontezuela). Sólo decir que de la Plaza Mayor al restaurante apenas hay doscientos metros y a veces existe una diferencia de tres o cuatro grados de temperatura.

¡Sorprendente! Después de un día en en el campo encontramos el restaurante ideal para reponer fuerzas y estar a gusto.Al entrar da un poco de cosa por su buena apariencia y piensas (que palo me van a dar)...

Muy lejos de la realidad, la comida 9, atención 9, lugar 10. Mezcla de cocina Argentina con algún matiz Italiano y una pincelada francesa (muy original), raciones abundantes y muy bien elaboradas. El comedor ideal y nada recargado, atmósfera muy agradable.

Es como el salón de una casa antigua. El precio nos sorprendió por lo equilibrado ( unos 23 € persona con propina). Si vais a Cercedilla esta es una excelente opción.

Fuimos a cenar a La Herrería como se suele decir de rebote tras seguir la recomendaciones que vimos en minube y fue estupendo. La verdad es que estuvimos solos pero el trato, la amabilidad y el cariño con el que nos atendieron se notaba que era marca de la casa. Cada comensal pedimos un plato diferente y a cada cual mejor. El servicio fue también rápido y la cuenta no nos asustó ni nos jorobó la sobremesa. Consideramos que el precio era razonable e incluso barato para lo que comimos, así que lo recomiendo y en cuanto tenga ocasión repito

Mala experiencia...hemos ido a comer en febrero....la comida buena a un buen precio, el trato bueno. Lo peor fue el frio...no tenian puesta la calefacción y lo hemos pasado muy mal... seguimos sin entender como un restaurante de la sierra no pone la calefacción en invierno. Nosotros no volveremos en invierno...aunque en verano ya veremos.

Un saluo

La relación calidad precio dejan mucho que desear. Las ensaladas y acompañamientos avinagrados.