Un fantástico restaurante en una ...
Un fantástico restaurante en una ubicación pésima, en un callejón mal iluminado, lúgubre y que no invita a entrar, pero los que nos atrevimos, en cuanto atravesamos la puerta azul (¡cómo no!), nos encontramos con una decoración sencilla pero acogedora, sin estridencias, pero con toques griegos como las fotos de las puertas de los baños, Onassis para ellos, María Callas para ellas.
Cocina típicamente mediterránea, con una cocina griega muy elaborada, y aunque suene a tópico, la mousaka es más que recomendable, además de varios tipos de ensaladas muy originales, y pescados muy bien preparados, con sabores y condimentos llamativos pero que van perfectamente emparejados.