Buscábamos un sitio dónde cenar sin hacer muchos kilómetros
Y parece que hemos dado con uno muy bueno. Hemos cenado de tapas. A sugerencia del camarero: Tomate de la Tierra aliñado y pimientos verdes fritos. De la carta: pulpo a la gallega y setas a la plancha aliñadas. De postre: tarta 3 chocolates y Torrija de sobao. Con bebida incluida: 46€. Un precio ajustado a la calidad y cantidad de cada plato. Sin duda, repetiremos. Tienen menú del día a mediodía por 11€. Veremos qué tal. El trato ha sido atento y muy amable.