Toda una experiencia gastronómica
Uno de los últimos lugares que más me ha hecho disfrutar gastronómicamente hablando.
No sé las veces que he venido a la que considero una de las villas más bellas de Cataluña: Montblanc. Mientras realizaba junto a mis amigos uno de mis hobys favoritos, callejear sin sentido dejándome llevar por todo aquello que atrae mi atención, encontramos este exquisito lugar.
Nos dejamos aconsejar sabiamente por Carmen, que está al frente de este magnífico restaurante y acertamos. Disfrutamos de platos exquisitos, de una compañía agradable, de un buen vino y cava de la zona, y de un lugar precioso. El restaurante se encuentra en plena Call (barrio judío medieval) de la villa, con unas vistas excelentes a las angostas calles y palacios de la zona.