Este restaurante se encuentra en pleno...
Este restaurante se encuentra en pleno centro de la ciudad, a unos pasos de la Basílica de la Encina y del Ayuntamiento. Sin embargo, encontrarlo sería algo complicado de no ser por el cartel que hay en la esquina, al comienzo de la calle Aceiterías, donde se halla. Es una antigua casona de piedra rehabilitada, con varias plantas y zonas:
-En la planta baja se encuentra la vinoteca donde se puede tapear.
-En el sótano tiene un pub.
-En la planta primera se halla el restaurante propiamente dicho. Tiene dos zonas: El salón comedor, y una terraza acristalada con vistas al patio interior de la casa, que es una agradable terraza de verano.
Está decorado acorde con la arquitectura tradicional de la casona, con elementos rústicos estilo mesón. Ofrece una carta muy amplia, con variedad de raciones para compartir, carnes y pescados. Principalmente es cocina leonesa, con ingredientes típicos de la comarca, aunque elaborados con un cierto aire "de autor".
Nosotros éramos dos personas y pedimos tres raciones para compartir: Pimientos del piquillo rellenos de marisco, setas de temporada salteadas y micuit de pato con manzana asada, aunque la especialidad son las ancas de rana. Estaba todo buenísimo y, incluyendo postre y una botella de vino, salimos a 25€ por persona.
Un sitio de lo más variopinto y bastante recomendable.


