Maite
Servicio horrible
Su avaricia fué su perdición. Sabían de sobra que con el número (sólo 1) de camareros (si se les puede llamar así) como mucho podían atender a unos 15 comensales. pues bien, estos "señores" no se cortaron un pelo en meter en el comedor a 42 (los conté yo mismo) aunque, a veces, salía el encargado y hasta el cocinero en ayuda del "camarero", ya os podéis imaginar el servicio tan lamentable que consiguieron dar. Eso si, los 160 euros que nos cobraron a los cuatro bien rápido que los cogieron.