supercastell
Obrigadinha
Fue genial haber elegido este hostal para nuestra estancia en Oporto, además del precio está la amabilidad del matrimonio que regenta este hostal.
La mujer pasó a ser nuestra abuela obrigadinha, se comportaba como lo fuese, preguntándonos como nos iba, preocupándose de todo lo que hacíamos etc.
El marido nos acompañó hasta varios lugares para que comieramos como reyes por muy poco precio.
Un lujo.