No puedes irte de Sofia son probar la rakia.
No puedes visitar Sofia sin comer en Raketa Rakia Bar, un restaurante que se especializa en rakia (un especie de orujo búlgaro) y platos tradicionales búlgaros con toques modernas. El restaurante está situado en el Parque Doktorska Gradina unos 10 minutos andando desde el catedral y tiene una decoración chic-soviética con radios antiguos, pósteres de propaganda, y estrellas rojas por todos lados.
Tienen una carta amplia de rakia con variedades secas y dulces y de sabores como uva, manzana o membrillo. Como no soy un experto en rakia, pedí las recomendaciones del cañamero y nos trajo una rakia seca de uva hecha especialmente para el restaurante. La rakia es bastante fuerte, casi como un aguardiente, pero va bien para calentarte por dentro en un día de frio.
De comer, recomiendo la salchicha a la parrilla con patatas al eneldo. Fue riquísimo y contundente, justo lo que nos apetecía. De primeros, hemos pedido su aperitivo estrella – una mezcla de encurtidos, yogur, y queso blanco búlgaro que me recordó bastante a una ensaladilla rusa. Fue todo una sorpresa y la verdad es que el queso cremoso iba bastante bien con la rakia.
Los precios son algo elevados para Sofia, pero con rakia, entrante, segundo, y postre para dos, nos salió a unos 30 euros total – nada malo dado la calidad de la comida y el servicio amable. En serio, no te puedes ir de Sofia sin un almuerzo en Raketa!
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