Pedro Jareño
Bajando desde Central, una de las...
Bajando desde Central, una de las primeras opciones que existen para cruzar el río Limmat es atravesar este curioso puente de madera. Ideal para tomar unas primeras fotos de la ciudad. Cuidado si tienes vértigo porque lo cierto es que el puentecito, estando arriba, se mueve. Eso sí, las instantáneas que consigues desde sus pequeños miradores hacen que merezca la pena el esfuerzo.