Entre roca y arena con bella puesta de sol
Una vez dejamos atrás Southern y siguiendo la carretera de la costa en dirección oeste llegamos a Rockcliffe, tan idílico como pijo pero con una de las playas más famosas de esta costa al sur de Escocia, una vez más gracias a St. Ninian, santo católico y cristiano pero celta, el cual según cuentan las crónicas, en una bella puesta de sol se detuvo en esta playa para rezar y pasar la noche.
La playa es curiosa ya que hay una mezcla extraña de roca y arena, produciendo un efecto de una micro-playa entre micro-calas, por lo cual no son muchos los lugares donde encontrar arena, muy blanca y limpia por otro lado. Para llegar a las mismas hay que sortear algunas rocas, bastante resbaladizas y una vez allí estar muy atento a la marea ... más que nada para no volver al coche a nado.
Incluso estando en el sur del país, aguas claras pero muy frías y lo mejor, en un día claro como el que nos tocó a nosotros, las preciosas vistas a la costa inglesa, al mar, con una impresionante puesta de sol. Así que no es de extrañar que el mencionado santo hiciese parada aquí.
Una playa escueta pero muy vistosa y agradable de visitar a primera línea de la villa de Rockcliffe, en donde encontramos la típica furgoneta de helados y el pub / restaurante local.
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