A lo lejos se ve una playa con lo que parecen grandes bloques de hielo varados en la orilla, cuando te vas acercando no crees lo que estás viendo. Bloques enormes de hielo transparente que han acabado en la playa de arena volcánica empujados por las olas, algo impresionante para la vista, era Enero, así que el resto del año no se si habrá hielo. Habrá que volver en primavera.
Los icebergs, de tonos blancos, azules y marrones de la laguna glaciar de Jökulsárlón, se ivan desplazando en una lenta y sutíl danza hacia el océano donde en libertad algunos decidían viajar mar adentro y otros varaban en la cercana playa de arena negra, creando una imágen melancólica y a la vez preciosa. Inolvidable.
Una hermosa playa de arena volcánica negra plagada de hielos que van esculpiéndose por las olas de mar, dependiendo de la altura de la marea la colación de los hielos va variando.
Playa negra llena de trozos de hielo.
