El origen de una ciudad
La piedras erguidas de Randolphield fueron encontradas durante la época Victoriana en lo que fue la construcción de la carretera de St. Ninians, para comunicar dicha zona con el centro de la ciudad. Los estudios de las mismas apuntaban en un principio que marcaban el inicio del campo de batalla de Bannockburn (lo que no tiene sentido ninguno) pero pruebas posteriores cambiaron un poco la historia de Stirling.
Las piedras podrían tener alguna inscripción pero la erosión de las misma no ha dejado evidencia. Quedan dos piedras, curiosamente ubicadas en los jardines en frente de la comisaria de policía central (construida mucho después) que presenta una curiosa alineación entre las mismas, sugiriendo que podrían ser parte de un círculo. Los estudios realizados sobre las mismas nos llevan a la Edad de Hierro, más o menos cinco siglos antes del nacimiento de Cristo. Esto destruye la teoría de la fundación de la ciudad por un campamento romano y apunta más en dirección posible Tribus Pictas.
Los círculos de piedra indican culto religioso, tributo a los dioses y no estaban precisamente en el centro de la ciudad, como así podemos apreciar. Estas piedras se encuentran en las inmediaciones de St. Ninians una de las zonas de mayor importancia religiosa de todo Stirling, y claramente aquí tenemos sus antecedentes.
Quizás la ciudad, como asentamiento se fundó hasta antes pero ahora mismo estas piedras son el único indicio que tenemos para suponer cuando se fundó en la historia esta histórica ciudad que es Stirling.


