Paseo en barca por el Ganges

Amigos, os habla una viajera que ha dado prácticamente la vuelta al mundo y he de decir que, sin duda, no ha habido lugar más fascinante que haya visitado que la ciudad de Varanasi. Es increíble la vida que existe en esta cuidad; ya al amanecer la población se ha puesto en pie para llevar a cabo su rutina diaria, que va desde el aseo personal, al lavado de ropa, al rezo, a la pesca, a los ritos fúnebres... Todo esto, se desarrolla en los ghats o escalinatas que van a parar al río, el Ganges, y os puedo asegurar que la mejor forma de verlo, de empaparse de todo este movimiento, es sin duda hacerlo desde una barca.

Varanasi es sin duda una de las ciudades más complicadas para el extranjero. Aceptar el caos, la suciedad y la cercanía de la muerte no es algo sencillo para todo el mundo. Y un paseo por el Ganges supone acercarse a todo ello. Ya sea al amanecer o al caer la tarde, seguir el curso del rió más sagrado de India junto a los ghats de Varanasi muestra imágenes llenas de color acompañadas de cientos de sonido, desde rezos, a campanas o el mugido de las vacas que por allí pasean a su aire. Escenas llenas de vida de toda la gente que acude al río a rezar o sencillamente a darse un chapuzón y que se desarrollan tan cerca del lugar donde se incinera a los muertes llenando la orilla del río de un olor del que luego parece imposible desprenderse.