Parque de Nara

Nara es una tranquila ciudad fácil de visitar desde Kioto y perfecta para una escapada de un día. Se pueden conocer las mayoría de sus lugares de interés en un solo día, estando la mayoría de ellos en Nara-koen o parque de Nara.

En este extenso parque al que se puede llegar caminando desde la estación de Kioto están algunos de los templos más importantes de la ciudad, como el Todaiji y su gran Buda.

Además de esos lugares, no hay duda de que el mayor atractivo y reclamo de este parque son el más de millar de ciervos que viven en él.

Corretean a sus anchas y se nota que están acostumbrados a la presencia humana. Tanto que no dudan en acercarse sin ninguna vergüenza a cualquiera que sospechen puede darles algo de comer.

El parque de Nara Park 奈良公園 es una extensión enorme en el centro de Nara que alberga el templo Todaiji, el Kasuga Taisha, el Kofukuji y el museo nacional de Nara. Un viaje de un día es suficiente para ver lo más importante pero acabas destrozado. Por suerte hay un autobús circular que tiene pase de un día y que te permite cogerlo tantas veces como quieras para no dejarte nada en el tintero.

El parque además es el hogar de miles de ciervos. Son considerados mensajeros de los dioses y son el símbolo de la ciudad. Tened cuidado porque algunos pueden ser agresivos y si te descuidas se comen los mapas etc que lleves en la mano. Hay puestos de comida para ciervos en muchos sitios, se trata de una especie de galleta. El paquete cuesta unos 150 yenes.

En plena naturaleza, y por la ciudad, andan a sus anchas los ciervos sika. No son peligrosos, aunque no van a tener ningún tipo de vergüenza al acercarse a cotillear si tienes algo de comer. Están acostumbrados a las personas, y saben que normalmente siempre les cae algo. Si quieres darles de comer, hay puestos en el parque donde venden sembei, unas galletas de arroz especiales para estos animales.

Los ciervos tienen especial importancia en Japón, son animales sagrados porque son considerados mensajeros del sintoísmo.

Pero no todo son los ciervos, ves a muchas personas en las explanadas de este parque practicando tai- chi o pintando.

Inevitablemente uno pasará por este parque en un momento u otro de su visita, pues muchos de los puntos que ver en Nara se encuentran en él.

Dar un paseo con los ciervos por allí resulta extraño pero muy chulo. Los ciervos solo molestan si les das de comer. El parque es enorme, con muchos templos, y rincones preciosos.

Rodeada de ciervos a sus anchas. ¡Cuidado con la comida que eso si que no lo respetan mucho y pueden morder!

Con ciervos en todo su parque, a los cuales puedes tocar y sacarte muchas fotos. Muy bien cuidado y con mucha tranquilidad para disfrutar.

Probablemente una de las visitas que mas disfrute estando en Japón.

Un detalle de uno de los templos de Nara.

Es lo único interesante en Nara.

Siempre que veía Blancanieves cuando era pequeña deducía que era alquien especial porque se le acercaban los conejos, las ardillas y los ciervos... y siempre soñaba con que un día eso me sucediese.... sueño realizado en este pequeño rincón de Japón. El parque de los ciervos de Nara.

¡Visita obligada! A parte de tener uno de los templos más antiguos y importantes de Japón también es un lugar para relajarse, disfrutar de la naturaleza, sus ciervos y otros animales, templos, vida...

Puedes dar de comer a los ciervos y si te descuidas se comen tu mapa como me paso a mí. Situado en la ciudad de Nara. Al sur de Kyoto. Un lugar con encanto.