un día de emociones
El Parque de Atracciones de Madrid es un lugar mítico para todos los madrileños de los años 70 y 80 sobre todo. Y es que, seguro que ningún madrileño ha perdido la oportunidad de ir al parque de atracciones por excelencia.
Actualmente, del mítico parque donde todos hemos gritado en El gusano loco, La reina de África o Los siete picos, no queda nada. Se ha reformado y ahora tiene unas atracciones mucho más modernas. Aún así, mola. Ah! y el Viejo Caserón ahí sigue, dando sustos a diestro y siniestro.
De las atracciones nuevas, hay que destacar las montañas rusas, sobre todo La Araña, que es la típica montaña pero incluye un extra: los carritos giran sobre ellos mismos y nunca sabes si vas a pillar la bajada de espaldas o de frente. Hay dos montañas más: una normalita y otra que vas colgado de los raíles.
El parque de atracciones es un lugar interesante para pasar una jornada en familia, porque también tiene una zona infantil. Pero, sin duda, los que más disfrutan son los adolescentes, que acaban todos afónicos.
Una curiosidad: de los famosos siete picos queda un pequeño altar que hace honor a la diversión que proporcionó durante años.
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