Yolonam Parque Acuático

Aunque a ustedes no les pasara porque yo les estoy ya advirtiendo, pero bueno, siguiendo con nuestro camino, pasamos por un costado de este puente, según quien nos llevaba nos dijo que no pasaríamos mas haya de la frontera para llegar a este balneario, y no necesitaríamos ningún permiso, así que seguimos nuestro camino por un costado del puente, que por cierto como a cambiado, hace tiempo este lugar estaba limpio, no había vendedores ni personas que ocuparan el puente, pero en esta ocasión me llamó la atención que por todo el puente puedes encontrar vendedores ambulantes y también personas que te hacen el cambio de moneda en nuestro caso pesos por quetzales que es la moneda de Guatemala.

Por el paso nos ofrecieron el cambio aunque no lo vimos necesario, porque no pasaríamos mas allá de la frontera por lo tanto podíamos pagar aun en pesos, vimos como pasaban algunas personas el Río Suchiate, con cargamento en sus hombros lo que es ilegal aunque todos los días pasan de esa manera para evitar el pago de impuestos o cobro por meter su mercancía a nuestro país.

Tomé algo de vídeo, que podrán apreciar y ver como es esta frontera, aunque hasta donde se no es permitido grabar, pero nadie me vio y aquí esta la evidencia. Siguiendo el viaje, nos encontramos mas adelante gente de aduana quien nos pidieron nuestras identificaciones y nuestro permiso para pasar, a lo que le dimos nuestra explicación de a donde íbamos, y nos dijeron que esa ocasión nos lo pasarían porque no íbamos lejos, pero en la próxima debíamos pedir el permiso del lado de México, que hasta donde se no es difícil sacarlo.

Más adelante encontramos la entrada a la calle del balneario, aunque quien nos llevaba conocía el camino y por lo tanto no necesitamos información, aunque si estaba algo complejo adivinar que ahí era la entrada, caminamos unos 5 minutitos sobre esa calle, que por cierto no esta pavimentada, es algo angosta y a mi me pareció algo solitaria y muy escondida, eso no me gustó porque podría prestarse para asaltos, habrá que tener cuidado e ir a buena hora.

Al llegar al balneario, encontramos un portón azul y tuvimos algo de problema porque las entradas estaban en quetzales valían 25 adulto y 10 niños. La persona encargada le costo sacar la cuenta en pesos, hasta siento que nos cobró más caro de lo normal, como 35 pesos por persona, pero cuando entramos encontramos un lugar muy agradable, que te hace pensar que toda la travesía a valido mucho la pena. Albercas grandes y limpias, con el agua fresca, toboganes para niños y adultos. Lo que más me gustó, fue la decoración, el crear banquitas con un estilo de troncos cortados, que aunque parecía madera y no lo era, dan un aspecto muy agradable, total que las fotos no mienten, ustedes pueden ver lo bonito que es, y pues la verdad nos la pasamos de maravilla, pues como hace calor, el agua bien fresca, se agradece muchísimo y para los niños hay juegos y chapoteaderos, y para los adultos, también hay cancha de basquetbol y una tiendita para comprar bebidas.

La verdad el lugar es limpio y mi único pero que yo pondría, es que había muchas abejitas y pues eso si molesta, porque se paran en tu refresco eso seria lo único malo, porque de ahí en fuera, el lugar es muy bonito y pasas un rato muy agradable. Y pues en el regreso les sugiero pasar del lado contrario del que entraron por el puente, porque a nosotros nadie nos aviso y regresamos por donde entramos porque estaba lloviendo por eso no nos detuvieron pero debe hacerse por el otro lado ven como les digo que pura infracción anduvimos haciendo, pero aquí están los tips para que pasen limpios.

Y para regresar tomas la combi en donde llegaste, ahí mismo las encuentras para regresar a Tapachula y salen cada 15 minutos, así que es fácil regresar.