Cercano a carreteras, tres estrellas.
Manzanares es un enclave de comunicación entre este - oeste y norte - sur. Los alrededores naturales que pueden disfrutarse y el propio pueblo lo hacen muy recomendable ya que desde allí pueden realizarse multitud de excursiones, pero este parador tiene el inconveniente de estar en una encrucijada de carreteras, y el ruido de los camiones es omnipresente.
Su conservación, tras una reciente remodelación, es excelente. Una atractiva piscina y un comedor - bufé "El Azafrán" permiten hacer una alto del que el viajero no se arrepentirá.
Ubicado en una finca rústica con un pequeño jardín, es de los más modestos paradores, cuenta con tres estrellas, pero como siempre digo cuando hablo de estos establecimientos de la red, la calidad en el servicio está garantizada.