Mi primer parador
Este fue el primer parador que conocí de pequeño con mis padres, así que quizá mi opinión esté muy influida por ello.
La verdad, ahora que conozco muchos más paradores por toda España, tengo que admitir que si bien es un muy buen parador, hay otros mejores en cuanto a sus zonas comunes, sus servicios y sus vistas. No obstante para mí siempre ha tenido algo especial...
El aparcamiento está al otro lado de la carretera, mientras que el parador se cierne sobre la ría, aprovechando las vistas al máximo.
Las habitaciones son muy grandes, con terraza cubierta-balcón incluidos. Las zonas comunes están muy bien cuidadas y ambientadas, y el personal es sumamente amable. El desayuno (esto no habría ni que decirlo en un parador) es excelente.